Erase una vez…

... un niño que jugaba entre pinceles y cubos de pintura en el taller de su papá. Ese niño soy yo, FORNER, jugador de pintura.

A mis 22 años, superando una dura etapa emocional, decidí dedicarme profesionalmente a la pintura mural. Cuatro años después me interesé por el arte y decidí compaginar el trabajo con los estudios. Así pasé once años: compartiendo trabajo, universidad y disfrute, hasta licenciarme en Bellas Artes en el año 2013.
Durante esos años, participé en multitud de exposiciones, fruto de mi presencia en diferentes certámenes nacionales de pintura, donde fueron seleccionadas varias obras de mis etapas de vinilo y manchas sobre lienzo.

Al volver a cumplir 20 años, decidí sobresalir en el arte y alejarme de los estereotipos habituales de la pintura sobre lienzo. Es así como mi obra da un giro. La mancha desnuda, exenta de soporte, pintura en estado puro, la materia en su máxima expresión… se convierte en eje de mi discurso. El color pasa a ser el protagonista, para producir al espectador sensaciones, emociones y estados de ánimo.

Arte experimental de vanguardia.

Junto a mi mujer Eva, he creado la mayor obra de arte que jamás pude imaginar: mis dos hijos. Ellos, mediante la actividad creativa de diversión y disfrute que es el juego, me retornan a aquel niño, que hoy es FORNER, jugador de pintura.


TRASPASANDO EL ROSTRO

Le hemos visto profundizar en la naturaleza líquida de la pintura, actuar aliándose con el azar en el proceso de solidificación de la materia pictórica, dando lugar a una mágica y subversiva forma que juega con el volumen, el color y el espacio. Forner sabe mucho de pintura desde la experiencia, desde los sentidos y desde la acción directa y quizá por ello su condición de “Jugador de Pintura” le lleva a transgredir y romper límites entre los formatos habituales, liberando a la pintura de los soportes, dándole derecho a existir por sí misma. Pero el reto no es suficiente para él. Inquieto y decidido da un paso más para seguir jugando, dando un salto a lo inmaterial: la posibilidad de la pintura digital. Conoce las posibilidades del color, la composición vinílica y fragmentaria con la que es capar de abordar el paisaje o el retrato desbancando los códigos espaciales establecidos por la tradición y la modernidad. Son las franjas de color en sí mismo las que componen el rostro a partir de geometrías, trazos virtuales de enérgica vibración que buscan la esencialidad de recursos, suficientes para que nuestra mirada traspase la pantalla.

Alex Villar
Fashion & Art Projects


SOLIDART


Desde el año 2017, FORNER Jugador de Pintura, hace una acción anual, que consiste en hacer una donación de parte de la venta de las obras, a una ONG o asociación sin ánimo de lucro.

Como el propio FORNER indica, “la intención es devolver a la sociedad parte de lo que nos da, a través de una pequeña aportación mediante mi trabajo.”